Chimera Painter es un prototipo de inteligencia artificial para producir imágenes listas para emplear en un videojuego. Para que te hagas una idea, es una herramienta que se ha basado en la creación de un juego de cartas desde cero (a lo Magic o Hearthstone).
A partir de esta estética de animales y bestias imaginarias, crearon un entorno creativo a nivel visual, trasladado posteriormente a la red.
Para entrenar a esta GAN se creó un conjunto de imágenes a color, con contornos de criaturas adaptados a partir de modelos 3D. Mediante esta red son capaces de identificar y convertir los trazos que hemos dibujado en un modelo 3D, aunque los resultados, como hemos indicado, dependerán bastante de nuestra habilidad al dibujar.
Si queremos probar esta herramienta, no tenemos más que acceder a Chimera Painter. Tenemos varios pinceles, herramienta para borrar y distintos colores para cada parte del cuerpo.
Ya te adelantamos que es bastante difícil dibujar desde el móvil, pero si tienes compatibilidad con lápiz o una pantalla bastante generosa, puede que logres resultados sorprendentes.
Las GAN emparejan dos redes neuronales convolucionales entre sí: una red que crea las imágenes y otra red que determina si dichas imágenes son muestras del conjunto de datos de entrenamiento o no.
A través de una red generativa antagónica (GAN), Google es capaz de hacer que un garabato «cobre vida». La herramienta, además, funciona desde el teléfono, así que vamos a explicarte en qué consiste.
Una red generativa que crea quimeras
Chimera Painter es un modelo de aprendizaje automático principalmente enfocado a desarrolladores de videojuegos. No obstante, está abierto a cualquier usuario, por lo que podemos utilizarlo tanto por diversión, como para entender lo que consigue Google a través de machine learning.
Este modelo crea imágenes con un look muy de videojuego, al estilo de las cartas ‘Magic’ o cualquier otro juego de rol con criaturas de mazmorra.
A través de un completo editor podemos dibujar e ir seleccionando las partes del cuerpo: cabeza, piernas, cola, nariz, dientes, etc. De un dibujo sencillo creará un monstruo fantástico.
El aprendizaje automático tiene sus límites, y es que o nos trabajamos bien el dibujo o podremos recrear auténticos engendros de mazmorra (aunque esto es gran parte de la diversión).
Más allá del lado divertido y creativo, es interesante entender cómo funciona esto.