Investigadores chinos desarrollaron un método para regenerar baterías antiguas, devolviéndolas casi a su estado original.
Uno de los elementos más esenciales en los vehículos eléctricos es la batería, puesto que, sin ella, el motor no podría funcionar, y su rendimiento define la autonomía, la eficiencia y el coste. Actualmente, las baterías de iones de litio tienen una vida útil limitada, lo que obliga a los fabricantes y a los usuarios a reemplazarlas tras un número determinado de ciclos de carga y descarga.
Este proceso no solo supone un gasto económico importante, sino que también contribuye a la acumulación de residuos altamente contaminantes. Por ello, el avance logrado por un equipo de científicos de la Universidad de Fudan en Shanghai, China es uno de los más cruciales de los últimos años.
Y es que gracias a una innovadora tecnología, que todavía se encuentra en fase de mejora y desarrollo, los investigadores han conseguido revertir el envejecimiento de las baterías, permitiendo que duren muchos más años y, en teoría, puedan alcanzar una autonomía prácticamente ilimitada.
Fuente: msn.com