Ciudad de México 6 de julio de 2021._ En el área posterior a la Pirámide del Sol, concretamente dentro de la Plaza Gamio, espacio que alberga oficinas administrativas y de investigación, lo mismo que laboratorios y talleres de restauración, se ubica uno de los sitios menos conocidos de la Zona Arqueológica de Teotihuacan, la Cueva de Soruco.
Modificada en tiempos prehispánicos para funcionar como un marcador solar, registra el cenit del astro los días 19 de mayo y 25 de julio, 20 minutos después del mediodía, a la vez que otros fenómenos celestes, uno de los cuales se observa los días 24 de mayo y 20 de julio, cuando la estela de luz que ingresa desde su abertura, ilumina una laja rectangular de piedra colocada sobre un altar.
Por sus dimensiones –5.0 m de largo en dirección este-oeste y 4.20 m de altura–, dicha cueva, nombrada en homenaje al arqueólogo que la exploró, Enrique Soruco Sáenz, no está abierta a la visita pública, sin embargo, mediante un nuevo proyecto del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), podrá ser recorrida de manera digital.
Mediante una aplicación informática, actualmente en desarrollo y que se denominará ‘INAHgotables innovaciones en Teotihuacan’, se trasladará virtualmente este y otros espacios arqueológicos a computadoras y teléfonos móviles con sistemas operativos iOS y Android, a fin de difundir la riqueza patrimonial de este sitio, y favorecer a su mejor disfrute y conservación.