Elaboraron un nanomaterial que permite detectar huellas dactilares invisibles directamente en la escena del crimen. O sea, sin necesidad de trasladar las muestras al laboratorio.
Se trata de un material híbrido que basado en nanopartículas de sílice mesoporosas (MSN) combinadas con quitosano y dansilglicina, inaugura una nueva era para la criminalística.
Y es que mejora la eficiencia y precisión en la recopilación de evidencias.
La innovación es fruto de una colaboración entre científicos de Brasil y el Reino Unido, que representa un avance técnico y a su vez redefine los métodos de análisis forense a nivel mundial.
El nanomaterial llamado MCM-41 elaborado por el equipo interdisciplinario, se distingue por su capacidad para adherirse eficazmente a residuos de huellas dactilares invisibles plasmados sobre diversas superficies.
Incluye metales, plásticos, vidrios y objetos complejos como billetes de polímero.
Huellas
Mediante su composición única que integra la fluorescencia de la dansilglicina, se pueden visibilizar los patrones de huellas dactilares bajo luz ultravioleta.
A diferencia de los enfoques convencionales que requieren de estudios en laboratorio para procesar las muestras almacenadas, esta tecnología permite analizar evidencias directamente en el lugar de los hechos.
Esto ayudaría a reducir tiempo crítico en investigaciones criminales y evita la degradación o contaminación en las muestras durante los traslados.
Sobre esta posibilidad, el miembro de la Universidad de Leicester y coautor del estudio, Robert Hillman explicó: “El objetivo fue desarrollar un material versátil y eficaz que pudiera adaptarse a superficies de diferentes naturalezas químicas y ópticas, típicas en escenarios forenses complejos”.