Científicos crearon microscopios que permitirán comprender la base de las sensaciones y del movimiento y que «podrían revolucionar el estudio del dolor».
Según los investigadores, estos microscopios portátiles -del ancho aproximado de un dedo meñique- y que producen imágenes de alta definición en tiempo real de la actividad de la médula espinal de ratones, ayudarán a entender cómo tienen lugar procesos como el dolor crónico, el picor, la esclerosis lateral amiotrófica (ELA) o la esclerósis múltiple, entre otros.
La médula espinal transporta las señales entre el cerebro y el cuerpo para regular desde la respiración hasta el movimiento y, aunque se sabe que juega un papel esencial en la transmisión del dolor, aún no está claro cómo sucede este proceso a nivel celular.
Visión sin precedentes
Los nuevos microscopios, que permiten una visión sin precedentes de los patrones de señalización que se producen en la médula, ayudarán a entender cómo se desarrollan estos procesos y/o enfermedades, de acuerdo con los detalles de la investigación liderada por el Instituto Salk en La Joya, California, publicados este mes en las revistas especializadas Nature Biotechnology y Nature Communications.
«Nuestros microscopios portátiles cambian radicalmente las posibilidades de estudio del sistema nervioso central (…) Nos permiten ver la actividad nerviosa relacionada con las sensaciones y el movimiento en regiones y a velocidades inaccesibles para otras tecnologías de alta resolución», señaló Axel Nimmerjahn, autor principal del estudio.