México 13 septiembre._ Juan Manuel Gutiérrez Salgado del Cinvestav, encabeza el desarrollo de un ojo electrónico capaz de categorizar diferentes muestras de tequila para evitar falsificaciones. Esto, de acuerdo con su proceso de maduración en: blanco, reposado y añejo.
Este sistema bioinspirado se basa en una instrumentación portátil y de bajo costo que captura imágenes digitales de las muestras para identificar. Lo anterior, a través de análisis matemáticos y sus componentes de color. Es uno de los aspectos importantes en la medición de la calidad de los alimentos y bebidas.
Los resultados, publicados en la revista Biosensors, señalan que el ojo electrónico logró una tasa de 90.02 por ciento al agrupar las imágenes de las muestras de tequila estudiadas en tres categorías: blanco, reposado y añejo.
Muestras
En cuanto a los modelos computacionales utilizados para diferenciar y clasificar las muestras de tequila poseen una sensibilidad de 0.90 y una especificidad de 0.96, respecto de un puntaje ideal de 1.00.
“Estos datos indican que el sistema distingue de manera eficiente entre tipos de tequilas y los clasifica apropiadamente. También apuntan a que podría tener buen desempeño al analizar muestras más complejas, como tequilas mezclados o falsos”, señaló Gutiérrez Salgado.
Las adulteraciones en esta bebida están relacionadas a cambios en el color del producto. Los cuales, aunque no sean perceptibles al ojo humano, pueden ser identificados a partir del análisis propuesto, agregó el investigador de la Sección de Bioelectrónica.
El ojo electrónico consiste en un sensor de imagen de 8 megapíxeles, una fuente de luz blanca y un soporte para el contenedor de la muestra. Son componentes ubicados dentro de una caja negra que evita la entrada de luz externa a fin de capturar imágenes de buena calidad. Además, el sistema cuenta con una computadora de placa reducida y una pantalla de cristal líquido.