Un equipo de científicos de la institución italiana dio a conocer su nuevo ingenio: un transistor creado en base a pasta dentífrica, que puede ser digerido sin riesgos y que expande los alcances de la electrónica comestible.
La intención de los investigadores es emplear esos conductores para dar energía a píldoras inteligentes, útiles para mejorar la administración de medicamentos y la realización de análisis clínicos.
Un transistor creado con pasta dental: los detalles del ingenio
Se espera que este nanodispositivo se convierta en un componente clave de las futuras píldoras inteligentes, diseñadas para controlar las condiciones de salud desde el interior del cuerpo y luego disolverse de manera segura.
“Sin duda, las aplicaciones médicas representan el impacto más significativo de este desarrollo basado en la ftalocianina de cobre, presente en el dentífrico, que permitiría una monitorización remota de bajo coste para un gran número de pacientes”, explica Alessandro Luzio, investigador que integra el grupo liderado por Caironi en el IIT de Milán.
¿Cómo surgió la idea de usar pasta de dientes, con esta finalidad?
La primera persona que se dio cuenta del potencial de usar ftalocianina de cobre fue una exestudiante del grupo de investigación dirigido por Caironi, la doctora Alina Sharova.
Durante su doctorado, ella realizó una amplia selección de materiales semiconductores potencialmente utilizables en el campo de la electrónica comestible. Fue en este contexto que tuvo la idea de explorar pigmentos cosméticos con una alta probabilidad de ingestión, como los que se usan en la pasta de dientes o en los lápices labiales.