México 5 septiembre._ La necrobótica es la fabricación de robots biológicos a partir de los cuerpos sin vida o restos de cadáveres de animales.
La ingeniera mecánica Faye Yap reconoce que nunca pensó que sus investigaciones sobre hidráulica terminarían aplicadas a los muertos. Pero se encontró una araña sin vida, en el suelo del laboratorio. Tras observarla detenidamente, empezó a pensar por qué siempre se quedan encogidas cuando dejan de vivir.
A diferencia de otras criaturas, la araña no tiene músculos opuestos que se sicronizan, como nuestro bíceps y tríceps. Desde la Escuela de Ingeniería George Brown de Rice, el jefe de Yap y experto en robots blandos, Daniel Preston, explica que “resulta que las arañas, tan inexploradas, son ideales como modelos de necrobots”. Extienden sus patas “gracias a una cámara (prosoma) cerca de sus cabezas, se contrae y manda sangre a sus extremidades, forzando su despliegue”. Pura hidráulica.
Yap se puso manos a la obra y se hizo con una serie de arañas lobo que, vivas, son capaces de levantar más de dos veces su peso. Son más eficaces las de menor tamaño. Las eutanasió y empezó a probar si podían extender sus patas, una vez muertas, si se aplicaba presión hidráulica inyectándoles un líquido o aire. Técnicamente eso no es un necrobot, pero era el primer paso para ver si era posible la automatización.
Necrobots, de levantar el doble de su peso a ensamblar circuitos
Yap insertó una miniaguja en el prosoma de una de las arañas, la pegó y la conectó a una jeringa. Básicamente, aquello funcionaba con aire, pues el arácnido muerto comenzó a extender sus patas.
Lo siguiente fue probar si tenían potenciales necrobots al poner a la araña a hacer una labor repetitiva, como agarrar y colocar una resistencia en una placa de circuitería. Lo hizo sin problema.
Este avance fue publicado en la revista Advanced Science y tiene el apoyo de la NASA. ¿Serán más útiles los necrobots en el espacio que los C3PO? En realidad, Preston ve aplicaciones en entornos en miniatura, donde es importante que el necrorobot se degrade por sí mismo sin dejar contaminantes una vez cumplida su tarea.
Fuente: newtral.es