Los avances científicos ya no se limitan a los laboratorios, ahora también transforman la forma en que las marcas se conectan con sus consumidores. En Estados Unidos, la tecnología cuántica empieza a perfilarse como la próxima gran herramienta para la industria del marketing, capaz de ofrecer análisis ultrarrápidos y predicciones con una precisión sin precedentes.
La diferencia clave radica en que un ordenador cuántico puede procesar en segundos lo que a una supercomputadora tradicional le tomaría días. Este poder abre la puerta a campañas personalizadas en tiempo real, un salto estratégico en un sector que depende cada vez más de la inmediatez.
Tecnología cuántica y marketing en acción
El uso de tecnología cuántica promete revolucionar la segmentación de audiencias y el análisis de datos de comportamiento. Las marcas podrán entender mejor cómo reacciona un consumidor en distintas plataformas y adaptar sus mensajes de manera instantánea. Además, permitirá a las empresas optimizar presupuestos publicitarios de forma más eficiente, con modelos predictivos que anticipan tendencias de consumo.
Los primeros pasos ya se observan en iniciativas de grandes tecnológicas que exploran alianzas con universidades y startups. Del mismo modo, algunas agencias de marketing en California experimentan con algoritmos inspirados en lógica cuántica para acelerar sus procesos de segmentación.
Por otro lado, el impacto no se limita al área comercial. También tendrá efectos en la seguridad de datos, ya que la criptografía cuántica ofrece sistemas prácticamente inviolables. En consecuencia, los consumidores podrán interactuar con las marcas en entornos más seguros, un valor creciente en mercados donde la privacidad es clave.
Según proyecciones publicadas en agosto de 2025 por firmas de consultoría tecnológica, el mercado global de la computación cuántica aplicada al marketing podría superar los 2.800 millones de dólares en 2030.
