Desconectarse de las redes sociales durante siete días puede parecer una misión imposible en plena era digital, pero en Vietnam, quienes se atrevieron a intentarlo descubrieron resultados sorprendentes. Una semana sin TikTok, Instagram o Facebook fue suficiente para notar mejoras claras en su bienestar mental, según reflejan medios y usuarios en línea.
La iniciativa, que ha ganado visibilidad en distintas plataformas de Vietnam, ha mostrado efectos positivos en jóvenes que decidieron poner en pausa sus cuentas. Sin recibir notificaciones constantes ni deslizar sin parar por sus feeds, muchos afirmaron sentir más claridad mental, menos ansiedad y una reconexión con actividades fuera de pantalla. Además, varios participantes coincidieron en que dormían mejor y sentían menos presión por «estar al día».
Jóvenes, estudiantes y el regreso a una rutina sin pantallas
Este tipo de ayuno digital no es nuevo, pero el caso vietnamita destaca por cómo la desconexión voluntaria impactó en un sector especialmente vulnerable: los estudiantes. La mayoría de ellos expresó que la semana sin redes les permitió reconectarse con sus hobbies, mejorar su rendimiento académico y reducir la fatiga mental. Del mismo modo, algunas escuelas incluso han empezado a considerar pausas tecnológicas como parte de sus estrategias de salud emocional.
Por otro lado, especialistas en salud mental del país han respaldado estos hallazgos, señalando que incluso pequeños descansos digitales pueden ser altamente beneficiosos. Las cifras lo refuerzan: en encuestas recientes, más del 60% de los participantes reportaron una mejora significativa en su estado de ánimo tras dejar las redes sociales por una semana.
Esta tendencia cobra relevancia al considerar que, según datos del Ministerio de Información y Comunicación de Vietnam, más del 70% de la población usa activamente redes sociales.
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