La lección más potente del estudio Content Marketing Trend Study 2025 de Statista es simple pero disruptiva: la confianza dejó de ser un output secundario para convertirse en la moneda principal de la publicidad.
Al respecto, José Jacinto Reynoso González, especialista en publicidad destacó que a pesar de que en los últimos años ha predominado la creencia de crear más contenido y más publicidad, el sector está regresando a las bases a través de los consumidores.
“No basta con producir más contenido; hay que producir contenido que valide, explique y demuestre, eso es lo que compra hoy la audiencia B2B y B2C”, sostuvo.
“En vez de pensar en «campañas», pensemos en Arquitecturas de Confianza, estructuras de contenido diseñadas para certificar veracidad y utilidad en cada punto de contacto. Esto implica fusionar tres capacidades: narrativas basadas en datos (data storytelling), automatización inteligente y canales que refuercen la credibilidad como podcasts, eventos híbridos o micrositios interactivos, por mencionar algunos”, profundizó Reynoso González.
Data Storytelling, la clave
El estudio de Statista identifica la data storytelling como tendencia clave y revela además que la adopción de herramientas de IA ya es masiva: el 92% de los marketers B2B usa IA de forma regular para tareas que van desde la automatización hasta la personalización.
Pero la innovación no es solo tecnológica, también es organizacional y es que Statista señala que las cinco grandes tendencias para 2025 incluyen IA, personalización, data storytelling, UGC y video corto, tendencias que pasan de experimentos a procesos sistemáticos.
Para transformar esas tendencias en confianza medible, José Jacinto Reynoso González propone introducir un un KPI compuesto por verificabilidad, persistencia y engagement de confianza.
“Implementarlo obliga a invertir en data, visualización y procesos editoriales, áreas donde muchas organizaciones reportan cuellos de botella”, añadió.
IA con uso estratégico
“La IA potencia escala y velocidad, pero la narrativa estratégica y el juicio editorial siguen siendo humanos. Si las marcas integran arquitectura, métricas y ética, 2025 será el año en que la publicidad deje de hablar mucho para empezar a ser creíble”, concluyó Reynoso González.