TikTok, Instagram y otras plataformas no solo están transformando la forma en que nos comunicamos. También están reconfigurando la atención de millones de personas, especialmente entre adolescentes y jóvenes mexicanos. Un nuevo estudio encabezado por el Instituto de Tecnología de Monterrey (Tec) revela una correlación directa entre el uso constante de redes sociales y síntomas relacionados con el Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH).
Lejos de ser una conclusión alarmista, la investigación, publicada en noviembre de 2025, expone que los algoritmos de contenido corto, con recompensas inmediatas y estimulación constante, pueden generar alteraciones en los circuitos cerebrales encargados de la atención sostenida y el autocontrol. Lo más preocupante es que esto afecta incluso a quienes no tienen diagnóstico previo.
El algoritmo también moldea la salud mental digital
Las redes sociales no solo capitalizan nuestra atención: la condicionan. Según el estudio, cuanto mayor es el tiempo de exposición diaria a plataformas con scroll infinito, más elevados son los niveles de distracción, ansiedad y dificultad para enfocarse. En México, donde adolescentes pasan en promedio más de 4 horas diarias en redes, la advertencia no es menor.
Además, la investigación señala un fenómeno nuevo: la aparición de síntomas temporales tipo TDAH, incluso sin antecedentes clínicos. Este “TDAH inducido por tecnología” podría revertirse, pero solo si se ajustan los hábitos digitales.
Un dato relevante subraya la urgencia: en pruebas realizadas a estudiantes mexicanos entre 14 y 22 años, se detectó que quienes usaban TikTok más de 90 minutos diarios tenían hasta 40% menos capacidad de concentración en tareas académicas.
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