La discusión en la Cámara de Diputados en México dio un giro inesperado con la iniciativa de incluir a las bebidas electrolíticas azucaradas dentro de la Ley de Ingresos 2026. Actualmente, marcas como Electrolit están registradas como medicamento y evitan el pago de IVA e IEPS, pese a contener niveles de azúcar superiores a los refrescos tradicionales.
El planteamiento establece que estas bebidas comiencen a tributar como cualquier producto saborizado con alto contenido de azúcares. Además, se estima que esta medida podría generar entre 4,200 y 5,000 millones de pesos en recaudación para el próximo ejercicio fiscal.
Ajustes propuestos en el marco legal vigente
La propuesta contempla reformas a la Ley del IVA, la Ley del IEPS y la Ley General de Salud. Asimismo, busca que solo se mantengan exentas de impuestos las soluciones de rehidratación oral que cumplan con la fórmula de la Organización Mundial de la Salud y que se utilicen de manera exclusiva en programas de salud pública.
En consecuencia, el objetivo es que las bebidas con alto contenido de azúcares o edulcorantes dejen de beneficiarse de vacíos legales que les permiten comercializarse sin cargas tributarias equivalentes a las de otros productos. También se persigue garantizar un control más estricto de su regulación nutricional.
Por otro lado, legisladores del Partido Verde y del PT respaldaron la medida y señalaron que la cifra recaudatoria podría superar los cálculos iniciales si se aplica de manera completa.
De igual manera, el secretario de Hacienda indicó que la dependencia está abierta a revisar la iniciativa y realizar los ajustes necesarios en el marco de la Ley de Ingresos 2026.
Un análisis técnico difundido en septiembre estimó que la recaudación por gravar bebidas electrolíticas azucaradas equivaldría a más del 0.1% de los ingresos fiscales anuales.